Patricia Hernández Mendoza es parte de los 50 mil guanajuatenses que perdieron su empleo con la llegada del coronavirus y el inicio de la contigencia sanitaria, lo que la llevó a estar 6 meses sin trabajo, viviendo de la venta de tacos al vapor, donde el ingreso no era seguro.
La señora Hernández es madre soltera y jefa de familia, por lo que tras enfrentar el desempleo y la crisis económica decidió emprender, y hoy encontró la respuesta a su necesidad en un programa del gobierno municipal, con el que asegura que iniciará una pequeña pizzeria en casa; un negocio familiar que le cambia el escenario y le da una esperanza muy grande para salir adelante.