El Trastorno del Espectro Autista (TEA) no es una enfermedad cerebral ni una discapacidad. Es una condición o trastorno permanente de origen neurológico y genético, que se inicia en la etapa de la infancia.
Consiste en un conjunto de alteraciones que afectan al neurodesarrollo infantil, incidiendo en las habilidades sociales, comunicacionales y conductuales del individuo.
Por ello cada 18 de junio se celebra el Día Mundial del Orgullo Autista, una efeméride orientada a disminuir la discriminación e impulsar la aceptación hacia las personas que presentan esta condición, de origen neurológico.
Se trata de sensibilizar y concienciar a la población acerca de la neurodiversidad, destacando el respeto, el acompañamiento y la no discriminación.