La palabra discapacidad se ha asociado con la no aptitud para realizar algo, aunque también para denominar a personas que por alguna situación o de nacimiento tienen una condición que para muchos limitaría su capacidad de vivir, incluso de triunfar.
Terminaron los Juegos Olímpicos, donde el alto rendimientos físico da satisfacciones, pero tras su conclusión como cada cuatro años, llegan los juegos Paralímpicos. Una justa que saca lo mejor de seres humanos que su condición le ha complicado en muchas ocasiones llevar una vida normal.
Nacido en León, Guanajuato, Ángel Camacho cuenta con 19 años de edad y por diferentes circunstancias desde nacido no sabe lo que es tener brazos y piernas, su tesón lo ha llevado a convertirse en el multimedallista más joven del deporte especial en México en una disciplina que muchos ni siquiera con todas sus capacidades puede sobresalir: la natación
Pero algo que personas con estas capacidades padecen es la inclusión en muchos sentidos, pero Ángel ha demostrado que es posible.
Su proceso de también haber sido medallita en la edición de Tokio no fue fácil, el camino antes del deporte fue aprenden a adaptarse a un mundo que no fue pensado para personas como él, para después buscar el apoyo de la familia primeramente el cual fue total, para después buscar el auspicio de las áreas deportivas gubernamentales.
Ángel y su tenacidad lo llevaron a ganar 3 medallas, rompiendo paradigmas, demostrando que cuando algo se quiere se puede lograr, independientemente de las limitaciones físicas, se deben derrotar las mentales.
Como Ángel hay grandes ejemplos de éxito en personas con condiciones diferentes a la mayoría, que contrario a lo que se creé pueden superar cualquier obstáculo, incluso si los obstáculos somos nosotros mismos. Felicidades campeones.