Juan Méndez, tiene cinco años trabajando para una empresa que se dedica a la renta de equipo y mobiliario para eventos sociales y empresariales, sector que ante un semáforo rojo se vió obligado prácticamente a cerrar.
En su empresa, de 25 trabajadores sólo quedaron cuatro, Juan es uno de éstos cuatro que se mantienen aún con un empleo con menos horas debido a que los eventos fueron cancelados.
Ante ello, Juan quien tiene dos hijas pequeñas, tiene que buscar realizar otro tipo de trabajos como mantenimiento u otros oficios para poder sacar adelante a su familia.