La recaudación fiscal en nuestro estado se remonta al año 1822, al instaurarse la diputación provincial, y 1824 con la instalación del primer congreso constituyente.
A nivel nacional, en mayo de 1853 y enero de 1854 el presidente Antonio López de Santana, emitió decretos para cobrar impuestos por cada perro, coche y carreta que tuvieran las personas y por cada puerta, ventana y alumbrado exterior que hubiese en sus casas.
En aquella época, al igual que ahora, el pueblo sufría muchas penurias y la clase gobernante gozaba de enormes privilegios.
Algunos impuestos que en la actualidad cobra el gobierno del estado son los cedulares sobre ingresos de las personas físicas, sobre la nóminas y por la prestación de servicios profesionales,
Otros impuestos estatales son por la compra de coches usados y realizar actividades empresariales./