Los congresos estatales en México cuestan mucho, carecen de planeación y gastan sus recursos sin criterios de eficiencia y transparencia, aprovechando su facultad de aprobar presupuestos para ampliarlos y destinarlos a actividades no sustantivas, destacando, los excesivos sueldos que perciben los legisladores.
En México hay mil 113 diputados locales, un promedio de 35 por entidad, que cumplen funciones como presentar y aprobar leyes, ratificar nombramientos, vigilar otros poderes e iniciar juicios políticos, todo esto con el fin de defender el interés público, aunque su sueldo no está sujeto a su desempeño.
En nueve legislaturas locales, el costo por diputado, fue superior al de la Cámara de Diputados Federal en 2018, Guanajuato no figuró en esta lista, pero en 2019, se convirtió en quinto lugar entre los congreso locales que más recurso destinaron a sus diputados con casi 39 MDP por legislador.
De acuerdo al IMCO, en 2019 los congresos locales presupuestaron 14 mil 57 millones de pesos, cifra mayor a los 13 mil 926 millones de pesos que se destinaron para: derechos humanos, transparencia, partidos políticos, organización electoral y justicia electoral.