José de Jesús Murillo, nació en la calle Rivera de la Zona Centro, él al igual que sus cinco hermanos fueron hijos de mamá soltera quien falleció cuando José tenía 10 años de edad, quedansose bajo el cuidado de una conocida de su mamá.
A los 17 años ya estaba dentro del mundo de las drogas, no estudió y prácticamente estuvo vagando por las calles y a los 22 años se fué a la Ciudad de México con una hermana que finalmente no lo aceptó por su problema de las drogas.
A los 27 cuando regresa a León, trabajó en un taller mecánico y fue ahí cuando en una sobredosis de droga, de pronto se sintió mal y perdió la vista, a partir de ahí, y después de un gran peregrinar, se encontró con Dios, comenzó a estudiar para ser quiropráctico, pero con la contingencia tuvo que vender todo su equipo para poder comer.
En su lección de vida, José asegura que la drogadicción es solo una puerta falsa que deja incapacitadas a las personas, por ello es importante aprender a decir no y salir adelante de manera positiva.