En este siglo surgen formas de hacer negocios, uno de ellos son los emprendimientos que se caracterizan porque son realizados por una o pocas personas que venden o producen determinados productos o servicios.
En México, la edad promedio de los emprendedores es de 45 años, sin embargo, ser joven es sinónimo de energía y entusiasmo, sobre todo cuando se trata de iniciar una empresa o cuando se tiene una idea la gente joven trata de hacer hasta lo imposible por concretarlo sin importar cuánto se tenga que sacrificar o perder.
De acuerdo con datos del Inegi, en México hay 4.4 millones de emprendimientos de los cuales, 35% son de jóvenes menores a 35 años, en la que dicha tendencia poco a poco ha ido ganando terreno no sólo en el segmento de los 21 a 35 años, sino que también entre los 14 y 20 años.
Muchos jóvenes se niegan a esperar que les den una oportunidad, puesto que conocen el difícil mercado laboral y lo complicado que es, aunque posean estudios profesionales, hablan varios idiomas, estén bien capacitados en las nuevas tecnologías y otros aspectos formativos se les dificulta encontrar un empleo en el que valoren sus aptitudes y por ello deciden emprender.