Pasillos solos, platillos más, negocios tranquilos pues las cacerolas no se ocuparán con tanta frecuencia. Es lo que se puede respirar en el mercado del Barrio Arriba, tras la mudanza del Hospital General Regional que comenzó el día de hoy, pero que desde hace un par de semanas ya se sentía la baja actividad en la zona.
Comerciantes denunciaron que las ventas han bajado hasta en un 60 por ciento, afectando severamente los bolsillos de estos.