Debido a la sequía que azota la entidad y que ha afectado los volúmenes de agua en las presas, a la presa del Palote no solo le falta agua, ya que ante su ya nula captación hídrica también ha perdido afluencia de visitantes y clientes en los negocios de comida del lugar.
Según Elizabeth, de palapa el Pelicano, ha sido un 60 porciento menos la afluencia de clientes de su restarurant, además que tuvo que elevar un 10 por ciento los precios de sus productos luego que ya "no hay nada que pescar en la presa y tenemos que comprar afuera.
Elizabeth recordó que hacia mas de 10 años que la presa no estaba así de seca, y que nunca habían sentido tan poca afluencia de gente en los negocios de la zona.
Algunos propietarios de las palapas que existen dentro y en los alrededores piden apoyo de las autoridades para poder sostener esta situación.