El asma es considerado como un padecimiento crónico, que genera una serie de síntomas que pueden variar de acuerdo a la frecuencia, duración e intensidad:
*Respiración sibilante, caracterizada por la presencia de sonidos similares a los de un silbido. Es más notable si la persona está agitada o cansada.
*Tos improductiva, que suele ser más recurrente durante la noche y en las primeras horas de la mañana.
* Dificultad para respirar y sensación de ahogamiento.
*Sensación de opresión en el pecho.
* Puede haber presencia de secreción o mucosidad al toser.
Para el control y prevención de ataques de asma es indispensable tomar en cuenta las siguientes precauciones:
*Seguir las indicaciones del tratamiento médico que ha sido prescrito por el especialista.
* Asistir de forma periódica a los controles médicos.
*Usar los controles en caso de manifestarse un brote de la enfermedad.
* Evitar los factores externos que puedan incidir en una crisis de asma.