La enfermedad de Alzheimer es un padecimiento cerebral neurodegenerativo, crónico, progresivo, irreversible, sin tratamiento farmacológico específico, que aparece frecuentemente después de los 65 años, causa deterioro en las funciones mentales superiores
La enfermedad con todo lo anterior llega a causar incapacidad laboral y en las actividades de la vida diaria, llevando al que la padece a depender de su familia u otros.
También tiene un devastador impacto en las personas, sus familiares, sus comunidades y sus sistemas de salud. La demencia representa no solo una crisis, sino una pesadilla social y física.
El hecho es que una persona con Alzheimer es una persona que lo último que pierde es su necesidad de afecto por lo mismo necesita ser tratada con dignidad y respeto como adulto y no confundir con el mito de que vuelven a ser niños.