Cuando hay obras privadas o públicas, tiendas y negocios de comida son reactivados económicamente, ya que de acuerdo a Arturo Valladolid, encargado de una tienda de abarrotes, de las ventas totales, un 80% lo adquieren los trabajadores de la construcción.
Arturo Valladolid, señala que éste tipo de sectores benefician al ser esenciales.