El uso de métodos para prevenir embarazos no deseados no sólo es un tema básico de la salud pública sino también un determinante en la dinámica demográfica del país. En México sólo 7 de cada 10 (69.2%) de las mujeres en edad fértil han usado alguna vez cualquier método anticonceptivo.
De todos los métodos anticonceptivos distribuidos en México, el parche anticonceptivo es el menos conocido y accesible para la población femenina. Sólo 2 de cada 10 (20.9%) mujeres saben cómo funciona correctamente este método.
En los cuatro años recientes los avances en educación sexual han sido modestos, del 2014 al 2018 sólo aumentó 2.5% el total de mujeres con conocimiento funcional de este método anticonceptivo, de acuerdo con cifras de la Encuesta Nacional de la Dinámica Demográfica 2018 realizada por el Inegi (Instituto Nacional de Estadística y Geografía).
Los métodos más conocidos funcionalmente por las mujeres en el país son el condón masculino (89.5%), el DIU (87.2%), el implante anticonceptivo (86.8%), el coito interrumpido (80.7%) y la píldora del día siguiente o anticoncepción de emergencia (78.4 por ciento).