Sin lugar una de las tradiciones religiosas más importantes en el centro del país y con mayor arraigo en la ciudad de San Miguel de Allende es la "Traída del señor de la Columna".
Como cada año el evento congrego a miles de sanmiguelense que a lo largo de 12 kilómetros de recorrido vieron pasar la imagen del señor de la Columna desde el santuario de Jesús Nazareno en Atotonilco hasta ese barrio donde más de 20 mil personas lo esperaban, una fe y tradición que se remonta al año 1823.
En esta ocasión, la revelación de imágenes en la avenida Independencia contó con la banda de los Hermanos Mota, en conjunto con el Coro Infantil del Oratorio de San Felipe Neri, estas fueron develadas en presencia del obispo de la Diócesis de Celaya, Monseñor Víctor Alejandro Aguilar Ledesma, el padre Dante Gabriel Jiménez, así como los sacerdotes Pablo Figueroa de San Antonio de Padua, Josué Rodríguez de la Congregación del Oratorio y Jesús Celestino Cervantes de la Diócesis de Cuernavaca.
Como símbolo tradicional de este evento, la colación de tapetes coloridos fueron parte fundamental, ya que desde la avenida Independencia hasta el barrio de San Juan de Dios, se presentaron estas figuras de aserrín pintado, aunado a hileras de papel picado y globos que embellecieron las calles para esta celebración.
Para el tramo final de su recorrido, entre aplausos de las multitudes, se soltaron globos en símbolo de homenaje por el Bicentenario de la "Traída del Señor de la Columna", aunado a oraciones para entrar a la tradicional misa.
Con esta peregrinación de miles de feligreses, San Miguel de Allende vivió uno de sus días más emotivos, donde las familias de todo el territorio municipal convivieron pacíficamente, celebraron su fe y le dieron color a esta ciudad Patrimonio de la Humanidad.
Cabe recalcar que la Administración Municipal encabezada por el presidente Mauricio Trejo, para conmemorar los 200 años de esta tradición, develó en la plaza pública frente al templo del barrio de San Juan de Dios una escultura conmemorativa, se entregó una nueva campaña jubilar, se repusieron los azulejos representativos y se mejoró dicha plaza.
Dicha obra artesanal del Señor de la Columna mide 2 metros de altura y pesa 1.2 toneladas, y en lo que respecta la nueva campaña jubilar es de bronce y pesa 200 kilos.