En la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) estamos convencidos que la militarización no es la solución ante la inseguridad en nuestro país. Por ello, insistimos en la urgencia de hacer pública una verdadera estrategia de seguridad para frenar los hechos delictivos cada vez más frecuentes y la violencia creciente.
Más aún, ante la reciente aprobación en el Pleno del Senado del Artículo Quinto Transitorio que le permite al Ejército realizar tareas de seguridad pública hasta 2028, en Coparmex consideramos necesario revisar primero la inconstitucionalidad de las modificaciones a las leyes secundarias que fueron aprobadas previamente para permitir el pase de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA).
Por ello, reiteramos el llamado a los legisladores de oposición para que, en cumplimiento de sus atribuciones, integren y presenten ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) una acción de inconstitucionalidad para que sea el Poder Judicial quien haga respetar el Estado de Derecho.
Los mexicanos no merecemos ser rehenes de la violencia e inseguridad que impera en nuestro país y que en su estallido más reciente en Zapopan, Jalisco, dejó como saldo una persona fallecida y seis más heridas luego de un enfrentamiento armado con el que se evitó el secuestro de un empresario local, esto según lo dado a conocer por los gobiernos Federal y Estatal.
Este hecho, que se sumó a los ocurridos en semanas recientes en Chihuahua, Guanajuato, Jalisco, Baja California, Zacatecas, Michoacán y Veracruz, sólo por mencionar algunas entidades, acentúa la ineficacia de la actual estrategia de seguridad que ha errado en decisiones como subordinar a la Guardia Nacional, una corporación de mando civil, a la SEDENA, de orden militar y ahora, mantener al Ejército en tareas que lo distraen de su objetivo de defender la soberanía nacional y pone en riesgo los derechos humanos e incluso podría poner en peligro el orden democrático.