Los campamentos de peregrinos a ver a la Virgen de San Juan de los Lagos están llenos de historias de fe que han orillado a muchos fieles caminantes a hacer este viaje por más de 40 años en agradecimiento a los favores recibidos.
Alejandro Riverol Becerril, fiel a la Virgen desde la Ciudad de México, dijo que estos viajes que hace año con año son en agradecimiento por milagros concedidos por la Señora de San Juan y que para él son muestras del verdadero amor de nuestra Madre Santísima.
"Mi madre estaba muy mal, sólo le pedí a la Vírgen que me dejara despedirme de ella, y no sólo me concedió eso, nos dejó disfrutarla 15 años más y felices.
Pero no sólo fue ese milagro el que hizo que Alejandro lleve ya 40 años caminando a ver a la virgen de San Juan, también su padre fue bendecido antes de ser operado de la coliumna.
"Mi papá se cayó y se fracturo el coxis, y justo la fecha de su cirugía era la salida para San Juan, y él prefirió venir con sus muletas, pero cuando lo vi ya no traía ni muletas ni bastón, un verdadero milagro", dijo el peregrino.