Iván Rivera. Los vecinos de la colonia San Isidro viven un suplicio cada que la época de lluvias llega a la ciudad de León, pues sus domicilios se inundan, tanto del agua que entra por la calle, como la que ingresa por las coladeras.
Desde hace algunos años, el agua que pasa por el Arroyo de las Liebres, comenzó a estancarse, lo que provoca que el agua no fluya naturalmente, se estanque y luego se desborde el río.
Otro problema que han encontrado los vecinos, es que con el cambio de tuberías de SAPAL, el grosor del tubo no es muy grande, lo que provoca que el agua no corra y salga por las coladeras de las casas.
En algunos domicilios, el agua que sale por las coladeras ha deteriorado las viviendas y por ello los dueños se ven obligados a vivir en otros lugares y buscar una posible solución con albañiles e ingenieros.