El robo de combustible es un mal que no cesa en nuestro país.
Pemex sufre pérdidas millonarias.
Por: Jorge Espejel
El impacto del huachicoleo en las comunidades donde se presenta con más frecuencia es multifactorial.
Juan José Hernández, director del Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (IGAVIM), señala, "también te genera otros delitos o incluso incrementa otros delitos como es el robo con violencia, el homicidio doloso, el robo de vehículo".
El Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal informó que de enero a septiembre de 2022 se identificaron 8 mil 115 tomas clandestinas en todo México, mientras que en el mismo periodo del año anterior se detectaron 7 mil 895.
Es decir, "hay un trabajo que está haciendo la autoridad, se ha visto esto, pero no significa que tenga una disminución en el delito".
Pemex perdió más dinero por robo de hidrocarburos, al registrar 14 mil 243 millones de pesos de enero a septiembre del año pasado en fugas de efectivo y 4 mil 801 millones en el mismo periodo del 2021.
Pese a las cifras más recientes, para el gobierno de México el combate al huachicol sí ha sido un éxito.
Del primero de diciembre del 2018 al 7 de marzo de 2022 calcularon ahorros por $197 mil 292 millones 938 mil 628 pesos, cifra equivalente a poco más de $165 millones de pesos diarios.
Las entidades más afectadas son Hidalgo, Estado de México, Tamaulipas, Guanajuato y Jalisco. Además, de 2021 al 2022 hubo crecimiento exponencial, particularmente en Tamaulipas, con un alza en tomas clandestinas de hasta el 241%.
Benjamín Gómez, vicepresidente de la región occidente y noroeste de la Federación de Transportistas, indica que "desde que le cerraron la llave al huachicol, esto cambió demasiado, porque se extendieron a otros estados".
A diferencia de años anteriores, hoy el tema ya no se toca con la misma frecuencia. La guerra se está perdiendo.