La extracción desmedida de agua de los canales para uso agrícola no tiene freno, lo que agudiza cada vez más la escasez del recurso. En el caso específico del canal Lateral 18, lleva alrededor de un mes enfrentando niveles bajos de agua, lo que ha impedido que la planta potabilizadora José Hernández Terán opere con normalidad. Esta situación ha afectado a más de 60 sectores en la zona sur de la ciudad, que sufren de baja presión y cortes recurrentes en el servicio.
Para agravar aún más la crisis, el pasado fin de semana la Junta de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Ahome (Japama) informó que, debido a los bajos niveles del canal Hidalgo, que abastece de agua potable a la planta potabilizadora Río Fuerte, la zona norte de la ciudad también experimentará una reducción en la presión del agua hasta nuevo aviso.
Por su parte, Topolobampo, uno de los lugares más afectados por la severa escasez de agua, ha reportado numerosos sectores sin suministro durante más de una semana. Incluso, barrios como La Guácima han estado sin el vital líquido durante casi un mes, debido a los bajos niveles en el canal 2+700, que abastece de agua cruda a la planta potabilizadora del puerto.
En medio de esta crisis, los habitantes se han visto obligados a almacenar el agua que se les distribuye a través de pipas en cubetas y tinacos. Sin embargo, el recurso es limitado, lo que ha impedido que llegue a todos los afectados. Ante la escasez, muchas personas se han visto forzadas a comprar garrafones de agua purificada, lo que ha incrementado el precio de este recurso esencial.