Las enfermedades crónicas, el envejecimiento, la globalización, el estilo de vida de la población, entre otros más son factores que la Organización Mundial de la Salud enlista como razones del incremento mundial de trasplante de órganos en los últimos años.
Entre el crecimiento de la lista de espera por trasplante de órganos y los donadores existe una diferencia que se refleja en miles de personas sin la posibilidad de mejorar su calidad de vida.
"De que nos están ganando los incrementos de la lista de espera, estás están creciendo, alrededor de un 15-20% anual y la tasa de donación está creciendo en un ritmo del 3-4% anual", destaca Carlos Castro, Presidente Ejecutivo de Asociación Ale.
Estadísticas en América señalan que 20 personas cada día mueren esperando un trasplante y cada 10 minutos una persona más se suma a la lista de espera.
En México, las acciones que desde hace años han implementado asociaciones a nivel nacional, entre ellas Asociación Ale, dejan ver un país altruista; las cifras revelan que en los últimos años se incrementó en un 88 por ciento la donación de riñón en vida. Aunque se observan avances en este tema, el país, todavía registra de las tasas más bajas a nivel mundial, es decir, 4.2 donantes por millón de habitantes.
"Hay un gran rezago de infraestructura, cuando usted analiza las cifras, en los Estados donde hay infraestructuras es donde están sucediendo las donaciones de órganos".
En Sinaloa, el Hospital General ubicado en Los Mochis registraba hasta 7 donaciones anuales, además la clínica 49 del Instituto Mexicano del Seguro Social fue el primer recinto médico de segundo nivel en implementar un programa de donación y realizar trasplantes. Actualmente, la actividad en este tema para ambos es casi nula.