Con las reformas de este 2020, el outsourcing ha tomado un especial interés entre el sector empresarial y profesionistas en el ámbito fiscal, quienes observan que en la reforma como tal en relación a pago a los servicios por outsourcing contempla situaciones positivas, sin embargo consideran se debe definir lo que es un outsourcing laboral y un outsourcing puro y que se aclare también mediante reglas de solución miscelánea específicamente a quién va destinado el pago y retención del impuesto de valor agregado a una tasa del 6 % sobre los servicios de outsourcing.
El outsourcing nace como una forma de frenar el uso excesivo de facturación apócrifas que se ha demostrado a través de diferentes auditorias.
El especialista en temas fiscales, dijo que la autoridad lo que está buscando con estas reformas es, que el trabajador reciba su ingreso por sueldo en la cantidad que realmente le corresponda, en razón de que se ha dejado de pagar a los trabajadores el beneficio que le corresponde por su sueldo, situación que sucede con el reparto de utilidades.
Sostiene que el que un trabajador forme parte de un outsourcing laboral y no ser empleado de una empresa le quita el derecho de participar en las utilidades, por lo que con dichos cambios, la autoridad busca regresar al trabajador un beneficio que se dejó de pagar por el hecho de que se crearon empresas bajo la figura de outsourcing laboral para reducir la carga laboral.