"Hace 28 años que llegué yo a esta ciudad" -Rafael Flores Luque, sastre.
Originario de Honduras, don Rafael Flores Luque, es un hombre de 63 años de edad que por acares del destino, llegó a la ciudad de Los Mochis un 6 de marzo de 1993.
A pesar de haber apostado a muchos oficios, decidió ejercer el que mayor pación le causaba y con el que más practica tenía, la sastrería, ya que su padre le enseñó desde la edad de 6 años como usar la maquina de cocer.
"Fue el talento que Dios me concedió, porqué de niño yo me hice un pantaloncito, me recuerdo bien, en ese tiempo no había ni cierres, era con botones, como los pachucos eran mis pantalones, te estoy hablando de la década del 60" -Rafael Flores Luque, sastre.
Con su maquina antigua asegura que se siente más cómodo que con ninguna otra, ya que la considera fuerte y solida, además de ser su compañera por décadas.
Comparte, que en la ciudad trabajó de alado de reconocidos sastres, los cuales son iconos de la ciudad, y de quienes aprendió grandes cosas.
"Trabaje en la sastrería Rodríguez, ya no existen, ya fallecieron, también con Don Pedro Alcázar que estaba ahí donde esta la rata muerta, ahí tenía su sastrería Don Pedro, un señor que también ya falleció con una edad de más de 100 años" -Rafael Flores Luque, sastre.
Actualmente trabaja en el mercado Cuactemoc, y comparte que se siente bendecido porqué desde su primer día aquí, el trabajo no ha dejado de llegar, recibiéndolo con la misma calidad y cariño que él siente por Los Mochis, de la cual, aunque no es originario, ha transformado en su hogar.