La crisis económica que se vive a propiciado que el arte circense del malabarismo se convierta en una buena opción para ganarse la vida, a través de esta actividad se pueden llegar a obtener ingresos a cambio de un acto exprés que dura un cambio de luces en los semáforos.
Y es que cada vez son más los jóvenes que ante la falta de oportunidades deciden aprovechar su talento en las calles, es el caso de Emmanuel un joven originario de la ciudad de México quien desde hace cuatro años se ha dedicado a recorrer la republica como artista mochilero con gran interés por aprender cada vez más sobre este arte.
"Me empecé a hacer unas pelotas de plástico y así viendo los videos empecé a practicar y cuando salí a la calle a ver otros artistas me di cuenta que hay muchas más cosas que hacer en ese ambiente"
Además de ser una forma de vida comenta la gran satisfacción que representa llevar un poco de alegría a las personas que disfrutan de su espectáculo , sobre todo en estos tiempos de pandemia.
"Puedo compartir muchas cosas a la gente , alegrarle el día y emociones que ocurren cuando uno se para ahí, más que nada es lo que a mi me agrada de venir a diferentes lados, igual aquí es la primera vez que vengo"
"La gente se sorprende, luego me graba o me dicen , ese acto no lo había visto o dé repente me han dicho, que haces tu aquí por que no vas a un circo"
Durante 15 días permanecerá en la ciudad de Los Mochis para después seguir su camino hacia el norte solo con la compañía de sus mejores aleados, un monociclo y un juego de pelotas.