Alrededor de 400 mil has de temporal en Sinaloa podrían dejar de producir ante la eliminación de apoyos orientados a incentivar la producción de alimentos, líderes agrícolas advierten que la falta de incentivos hacia este sector podría desencadenar en abandono de comunidades, delincuencia y otros problemas sociales.
La nueva política agropecuaria en el país pone en riesgo el sustento económico de miles de familias que dependen de la agricultura de temporal en comunidades rurales de Sinaloa, advierte el presidente de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas(UNTA) en la entidad.
Silverio Díaz, señala que la eliminación de programas como PRO-AGROPRODUCTIVO, así como también los candados por parte de la Financiera Nacional para el acceso a créditos baratos imposibilita a un gran número de pequeños productores para que puedan seguir cultivando sus tierras.
Créditos blandos para producir la tierra, apoyos para adquisición de semilla, créditos para la compra de maquina y construcción de pozos, son algunos de los mecanismos de apoyos que piden productores de temporal sigan vigentes.
El dirigente agrícola, expone que al igual que la agricultura la ganadería es otra actividad la cual ha sido relegada por parte del gobierno federal, por lo que el panorama para las familias que habitan en las zonas serranas de Sinaloa es preocupante.