Los altos costos de la gasolina merman de manera de manera significativa la poca utilidad para prestadores de servicios turísticos de Topolobampo.
Quienes ofrecen paseos en lancha por la había de Ohuira refieren el 2020 ha sido uno de los años más complicados para el sector, no solo por el golpe de la pandemia, sino también por los aumentos escalonados que ha sufrido el precio de la gasolina.
Actualmente, la demanda del servicio se mantiene baja, por lo que hay días en los que lancheros realizan solo 2 paseos por embarcación, con muy pocas ganancias.
De 32 embarcaciones, solamente 12 están activas y son poco más de 50 familias las que dependen de la actividad.
Ante la poca afluencia de visitantes al puerto, lancheros se han visto obligados a cambiar de actividad y es la pesca del camarón una opción para ellos.