En los últimos años la incidencia de infartos cerebrales se ha incrementado de manera considerable.
En base a datos proporcionados por el Hospital General de Los Mochis, esta unidad atiende un promedio de 3 y 4 pacientes por semana con este padecimiento.
Especialistas, revelan que el infarto cerebral llamado popularmente como derrame cerebral es un transtorno que daña un área del cerebro en forma permanente o transitoria a causa de una obstrucción no ruptura de un vaso sanguíneo cerebral, habitualmente una arteria.
El 88 % de los infartos cerebrales son ocasionados por un coágulo sanguíneo o la obstrucción de una arteria que lleva la sangre al cerebro y se le denomina isquémico.
El restante el 12 % de los casos se denomina hemorrágico y se producen cuando los vasos sanguíneos se rompen o se dañan, derramando sangre en el cerebro o alrededores de él.
Médicos especialistas recomiendan recurrir de manera oportuna a una unidad de salud si presenta los siguientes síntomas: dolor de cabeza brusco, dificultad para hablar, para caminar, pérdida del equilibrio, pérdida de la visión.
Especialistas señalan que el mejor tratamiento para este padecimiento es la prevención.
Por lo que si se conoce los síntomas de advertencia y si se controla los factores de riesgo como el hábito de fumar, la hipertensión arterial, la diabetes y la enfermedad cardiovascular, es posible reducir el riesgo de sufrir un infarto cerebral.