En México las pesca representa una de las actividades económicas más importante, se encuentra entre los países de mayor producción de pescado y mariscos en el mundo. Son más de dos millones de personas que viven directa o indirectamente de ella.
En México la capacidad del Estado de hacer cumplir las normas de pesca para dar solución a la poca atención a la pesca sustentable se ha visto rebasada. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura señala que existe una extensión de más de 11 mil kilómetros y una flota pesquera que sobrepasa las 100 mil embarcaciones menores.
Leonel Sánchez, Presidente de la cooperativa pesquera del norte Sinaloa y sur de Sonora, señala que aunque se realizan esfuerzos por implementar técnicas de pesca que favorezcan a la producción y el sector, no se cumplen en su totalidad.
"Las artes selectivas no agarran mas que puro camarón y todo vivo no lo lastima, ni nada, pero bueno, hay gente que se encapricha en trabajar en una manera que no es la mejor manera de pescar", señaló.
El líder pesquero agregó que en el caso de los ribereños registrados en las cooperativas ubicadas en la zona norte de Sinaloa, cumplen con esta normatividad, es decir, redes que permiten la pesca sustentable con la finalidad de preservar el recurso; sin embargo, la industrialización que se genera en el litoral ahomense, carece de armonía con el sector lo que impacta en la producción y las especies.
La competitividad en el sector sigue siendo impactado por la sobrepesca, el poco valor agregado que tienen los productos, la pesca ilegal y los escasos cuidado al medio ambiente.
Estas acciones, además, amenazan la biodiversidad de mares y costas, el crecimiento económico así como los millones de empleos a mexicanos que se generan a través de está actividad.