El pasado 16 de febrero se llevó acabo el primer conti Yoreme-Mayo en el norte de Sinaloa, dando inicio a una tradicional festividad que durante más de 400 años ha llenado de colores a la región.
"Yo me siento feliz porque yo soy nacida aquí": Diana Martina Aboyte, ciudadana.
En total, en la la zona norte del estado hay 28 centros ceremoniales, entre los que destaca el centro ceremonial de San Miguel Zapotitlán, que es considerado el más grande, donde incluso ciudadanos de otros municipios acuden a esta gran fiesta.
Para la cultura Yoreme-Mayo, esta gran tradición simboliza el renacer de Jesús y estas corridas o contis son la manifestación que la comunidad Yoreme le realiza Jesús.
Las peregrinaciones comienzan con la reunión de los judíos, caracterizados con prendas de manta, máscaras, mantillas, tenábaris, mantas, sonajas y tambores, acompañados del rey Pilato, dando un recorrido hasta llegar al centro ceremonial.
En el segundo conti, la peregrinación se extiende hasta el pueblo y finaliza con la llegada al centro ceremonial, mientras que en el tercero, los judíos traen consigo a la Virgen y a los santos, a quienes le piden poder lograr el objetivo de este año.
"Aparecen las tradiciones de año con año, le damos un, una viveza, un realce realmente a nuestras tradiciones como las tenemos aquí en San Miguel y creanme, sinceramente más bonita no puedan existir como en San Miguel Zapotitlán": Francisco Martínez, ciudadano.
En total son 6 viernes, antes de la semana santa, donde en cada conti se le rinde tributo a un santo diferente.
De acuerdo a la comunidad indígena, esto es una gran tradición que transmitido durante generaciones, que ha ayudado a preservar las tradiciones y a la vez, ha logrado que todos sus integrantes se unan en armonía como una gran familia.
"Se han heredado las costumbres, los usos y costumbres de la raza a través de las mismas gente"
"Para mí esto es lo máximo, o sea esto yo no lo cambio por nada del mundo, por nada y he aprendido también a través de los años a defender a la raza": Diana Martina Aboyte, ciudadana.