"Empecé con un señor que me vendió 50 patas , me las dio a 10 pesos y le saque 30 y dije de aquí soy"
Recorriendo las calles de San Miguel Zapotitlán hace poco más de 50 años don Don Ramón Humberto Ibarra incursionó en la venta de mariscos aun que poco sabia de gastronomía la necesidad de llevar el sustento a su hogar lo obligó a aprender todo sobre la preparación de los productos del mar, fue así como poco a poco fue ganando clientes.
"Por la calle 5 de mayo daba vuelta en la plazuela y en cada punto de esa zona ya tenía clientes , llegaba hasta la gasolinera, ahí me devolvía y ya llegaba a las 6 de la tarde a la casa"
Años más tarde estableció una pequeña casetita en la calle principal de la comunidad la cual denominó mariscos " El Sabino" recuerda que en aquel entonces solo tenía una mesa para recibir a los comensales a quienes les preparaba cocteles, aguachile y ceviches a su gusto.
Don Ramón señala que el buen servicio y el respeto al cliente es primordial ya que no es suficiente con que el platillo sea delicioso, revela que esta lección ha sido fundamental para el éxito de su negocio.
"Vienen de Nogales, Tijuana de Los Ángeles , aquí estás todavía me dicen , tengo muchos conocidos"