La escasa o nula obra pública y privada en Sinaloa afecta no solo al sector de la construcción, sino también a productores y distribuidores de ladrillo.
Y es que en lo que va dela pandemia quienes se dedican a este oficio aseguran que las ventas se han caído por encima del 80 %, situación que ha afectado de manera importante el ingreso de familias que dependen de esta actividad comercial.
Así lo confirmó Margarito Váldez, quien tiene más de 60 años dedicándose a la venta de ladrillo en Los Mochis, quien consternado por la gravedad de la crisis nos comparte que actualmente se enfrentan a un duro panorama que jamás antes habían vivido.
"No pues no hay, sacamos nada más para comer, deberas, ganamos nomas un par de pesos nada más para comer, malcomer es verdad".
Antes de la crisis, vendedores de ladrillos sobrevivían por la demanda del producto para obra pública, sin embargo refieren que actualmente que ya ni eso, por lo que la situación en sus hogares se ha tornado complicada ante la falta de ingresos.
"Deberas que sí, nunca nos había pasado esto, sí habido pero no tanto, nosotros decimos que por la enfermedad que hay, nosotros le entregamos mucho a los ingenieros, contratistas para las obras de drenajes y ya se acabó todo eso".
Tan solo en el sector de la vivienda la pandemia ha provocando la caída del 40 % de la actividad durante el primer semestre del año.
De acuerdo a la CMIC, si 2019 fue considerado un año desastroso para la actividad productiva del sector de la construcción, que presentó una caída real anual de 5.0% respecto al 2018, con una pérdida de 150 mil puestos de trabajo, 2020 se perfila como un año aún peor. Los resultados del primer bimestre así lo confirman, al registrar una contracción de 8.6% en relación con el primer bimestre de 2019.