En el norte de Sinaloa es la pesca la actividad principal de la que depende la economía de poco más de 3 mil familias asentadas en comunidades pesqueras, 5 de ellas son habitadas por población indígena, sobre la bahía de Ohuira, zona natural protegida en donde se pretende construir el proyecto de la planta de amoníaco.
Investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) han advertido que al tratarse de un sitio Ramsar la zona en donde se pretende construir dicho proyecto el impacto será devastador para el medio ambiente, la salud y la economía.
Pescadores se dicen preocupados por la amenaza que representa dicho proyecto tras insistencia de autoridades municipales y estatales porque dicho proyecto se concrete sin considerar el daño que provocará al ambiente y al sector pesquero.
"Estamos viendo que va ser un impacto al medio ambiente, un impacto a la reproducción de las especies y también se reduce las áreas de pesca, entonces los compañeros pescadores la verdad que están preocupados": Alfonso Chaparro, presidente Federación de Cooperativas Pesqueras Siglo XXI.
Ohuira es una de las bahías más productivas de Sinaloa y el país, sin embargo la construcción de dicho proyecto representa una seria amenaza para la reproducción de las especies como el camarón, jaiba y moluscos bilvalvos.
Líderes pesqueros en el norte de Sinaloa, piden al Gobernador del Estado, Rubén Rocha Moya cumpla la promesa que hizo de que en su gobierno no habrá cabida para la corrupción, en este sentido exigen se transparente el uso de los terrenos federales en done se pretende construir el proyecto, así como también se respeten tratados internacionales que protegen el sitio Ramsar de la bahía de Ohuira.
"Anárquicamente se está construyendo, es un sitio Ramsar, el terreno es una zona federal que no debieron haber escriturado a nombre de personas físicas": Alfonso Chaparro, presidente Federación de Cooperativas Pesqueras Siglo XXI.