Con un sistema de presas Río Fuerte al 21 por ciento de su capacidad de conservación, con pozos que ya empezaron a secarse como consecuencia del estrés hídrico que persiste en gran parte del territorio, productores ganaderos del norte de Sinaloa vislumbran una fuerte crisis como consecuencia de la sequía que ya se asoma.
Y es que, además del bajo precio de la leche y del becerro en pie, ganaderos se enfrentan al impacto de la escasez de agua que, cada año pega con mayor fuerza debilitando a un sector que se resiste a morir y de suma trascendencia en la producción de alimentos en el país.
En la zona serrana del municipio de El Fuerte ganaderos presentan dificultades para abastecer del recurso natural al hato ganadero, pues los pozos y arroyos se están secando.
"Ahorita andamos buscando la manera de cómo resolver el problema donde tienen abrevaderos que les queda un poco de agua en los arroyos pero hay parte donde ya estamos llevando agua en pipas porque no hay agua": Cornelio Vea, presidente de la Asociación Ganadera Local de El Fuerte.
Conseguir alimento para el ganado ya se empieza a complicar, debido a que los pastos se secaron y encarecieron, ¿la esperanza ? el inicio de la cosecha de maíz.
"Ya se vienen estos 3 meses que es abril, mayo y junio y parte de julio, las dificultades pero conforme va pasando el tiempo esto va empeorando": Cornelio Vea, presidente de la Asociación Ganadera Local de El Fuerte.
La falta de apoyos por parte de los tres ordenes de gobierno complica a ganaderos poder enfrentar de la crisis que provoca la escasez de agua cada año, sin embargo este sector se muestra resiliente con la firme convicción de sobrevivir.