Imagina un mundo sin agua, ir al baño sin poder lavarte las manos, ir a la cocina sin poder lavar una fruta, ir a la escuela sin poder tomar agua del bebedero, imposible, ¿verdad? Esta situación poco imaginable es una realidad para millones de personas que no tienen el privilegio de abrir una llave y poder tomar agua y en esta semana mundial del agua, es imperativo reconocer la importancia de un recurso tan vital e invaluable como el agua.
Según datos de la UNICEF y la Organización Mundial de la Salud, más de 2 billones de personas en el mundo no tienen acceso al servicio de agua potable de manera segura, 1,800 billones beben agua que no está protegida de contaminación de heces y cada año, mueren alrededor de 340 mil niños menores de 5 años por enfermedades diarreicas a raíz del consumo de agua contaminada. Cifras alarmantes que llama a todos los organismos civiles a unir esfuerzos y tratar de combatir este problema social que nos compete a todos.
En esta semana mundial del agua, que comprende del 23 de agosto al 1ro de septiembre, es importante reconocer la vitalidad de este recurso que cada vez más es un lujo para millones de personas que deben recorrer kilómetros y horas de camino para poder tener un vaso de agua al alcance de la mano.
En un intento de frenar la escasez de agua en el mundo, la Organización de las Naciones Unidad continúa hermanando esfuerzos con organismos civiles para hacer frente a este problema mundial, donde tienen una agenda ambiciosa que plantea que para el año 2030 todos los habitantes del planeta tierra puedan contar con el acceso universal y equitativo del agua, sin embargo, en esta meta no solo está involucrado una estructura gubernamental, sino también una sociedad que debe ser consciente, partícipe y empática que se sume a este proyecto desde casa cuidando el vital líquido a través de pequeñas acciones que en un futuro harán la diferencia.