En la lucha contra la sequía extrema que afecta a gran parte del territorio mexicano, la tecnificación del campo se vuelve una necesidad urgente en la agricultura, esta modernización no solo promueve un uso más eficiente del agua, sino que también ayuda a prevenir el estrés hídrico en las plantas.
Recientemente la Comisión Nacional del Agua(CONAGUA) anunció el Programa Nacional de Tecnificación de Riegos a nivel nacional en donde se busca beneficiar a 13 distritos de riego en el país, entre ellos el Distrito 075 de Ahome y Guasave.
" Celebramos que el distrito 075 inicie junto con otros distritos este nuevo proyecto presidencial que para nosotros viene a darnos muchos beneficios , en ahorro de agua, en conducción, a nivel parcela vamos a tener mucho ahorro de agua" César Galaviz ,Presidente de la Asociación de Agricultores del Río Fuerte Sur.
Este programa incluye la modernización de canales así como la instalación de sistemas de riego más eficientes y la optimización del uso del recurso natural, con una inversión histórica de 40 mil millones de pesos.
El objetivo es tecnificar 200 mil hectáreas en México, especialmente en Sinaloa uno de los estados donde la sequía ha causado mayores estragos.
Datos de la Comisión Nacional del Agua revelan que el sector agrícola en México consume la mayor parte del agua disponible , de ese total el 57 % se desperdicia debido a la deficiente infraestructura de los sistemas de riego.
"La idea es que los módulos van a presentar sus proyectos, cada módulo va a decir en que quiere invertir para mejorar su eficiencia y rescatar más volumen por la que la situación se torna difícil por la disponibilidad de agua en las presas" Blas Espinoza Quintero, Jefe del Distrito de Riego 075 de la Comisión Nacional del Agua.
Actualmente, el sistema de presas del Río Fuerte se encuentra al 28.4% de su capacidad de conservación, con solo 1,994.3 millones de metros cúbicos de agua almacenados, de una capacidad total de 7,034 millones metros cúbicos.
Si la situación no mejora, los productores se verán obligados a priorizar cultivos de baja demanda hídrica, limitándose al recurso disponible, lo que hará que este año agrícola sea aún más difícil que el anterior.