Bahía de Ohuira, es el cuerpo lagunar más importante del sistema lagunar Topolobampo, desde 1951 está siendo impactado por gran cantidad de contaminantes como consecuencia de las descargas agrícolas que son arrojadas a la bahía sin tratamiento previo.
Diversas investigaciones científicas han advertido que han encontrado plaguicidas en grandes cantidades en sedimentos, camarones, peces y aves que son altamente peligrosos tanto para el ecosistema como para la salud de las personas que lo consumen.
Pero si ya se conoce y está comprobado científicamente que son las descargas agrícolas el principal factor de contaminación a la bahía, ¿Por qué no se actúa?
Sencillo, por contar con una Ley laxa y generalizada, y es que, la NOM 001 resulta que no aplica para la actividad agrícola porque teóricamente las descargas agrícolas están tipificadas como no puntuales pese a que en los distritos de riego a través de drenes se puede medir el cause del agua y su concentración, pero curiosamente no les aplica la Ley.
"Tienes sitios por los cuales encausas del agua y puedes medirla, puedes medir el cause y puedes medir la concentración pero no les aplica la Ley, entonces ellos lo hacen impunemente y ellos no tienen la culpa es la Ley que está así": Diana Escobedo, investigadora del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Pero ¿Qué hace falta para obligar al sector agrícola para por lo menos tratar el agua antes de la descarga a la bahía?
"Se necesita reconocer que tenemos un problema, sí modificar la Ley, que les aplique la legislación a ellos, tipificar la agricultura caso del distrito de riego como descarga puntual y luego definitivamente un sistema de tratamiento": Diana Escobedo, investigadora del Instituto Politécnico Nacional (IPN).
Aunado a las modificaciones en la Ley, investigadores han propuesto una serie de alternativas de solución, económicas, viables y rápidas, un ejemplo ha sido la implementación un sistema de tratamiento de humedales artificiales que de manera natural los drenes agrícolas lo tienen a través del tul que hace que el agua se detenga y disminuya el impacto.
Pero ¿Por qué no se actúa?, fácil, porque tristemente autoridades de diversos ordenes de gobierno solo autorizan proyectos que les den visibilidad y dependiendo de l número de votantes y beneficiados.
"Por qué no se hace nada, porque normalmente estos sitios están rodeados por pocos votantes": Diana Escobedo, investigadora del Instituto Politécnico Nacional (IPN).