El sector aguacatero está siendo revisado con lupa por el gobierno de Michoacán, la Secretaria de Desarrollo Económico ya realizó 29 sanciones contra quienes presentan irregularidades en su proceso de producción, así como el aseguramiento de los empleados, pues son un sector vulnerable. Claudio Méndez, titular de SEDECO, señaló que se continúa con las inspecciones para lograr que los empleadores mantengan en regla sus empresas.
Expresó que ya se tiene el marco jurídico para sancionar a quienes no cumplan con la meta de que los alrededor de 110 mil empleados tengan seguro, resaltó que actualmente no se llega ni a los 20 mil beneficiaros con este derecho. Entre huertas, empresas de corte y empaques se están analizando para que se mantengan al margen de la ley ya que los mercados internacionales ya se encuentran solicitando que los productos exportados de Michoacán estén libres de deforestación y el Estado en la mira con el mayor número de empleos formalizados.
A pesar de que los jornaleros pueden ganar entre 2,500 y 4,000 pesos semanales cuando el corte es abundante, sus ingresos no reflejan una seguridad laboral. En los pocos casos en que son asegurados, esto se realiza con el salario mínimo, lejos de sus verdaderas percepciones. Las campañas gubernamentales para formalizar a estos trabajadores han tenido poco impacto.
La seguridad social es una institución nacida de la solidaridad humana, que se manifiesta en la reacción de ayudar a personas o grupos en estado de necesidad. La Organización Internacional de Trabajo la define como la protección que la sociedad proporciona a sus miembros, mediante una serie de medidas públicas, contra las privaciones económicas y sociales que, de no ser así, ocasionarían la desaparición o una fuerte reducción de los ingresos por causa de enfermedad, maternidad, accidente de trabajo, o enfermedad laboral, desempleo, invalidez, vejez y muerte; y también la protección en forma de asistencia médica y de ayuda a las familias con hijos e hijas.