Además de arriesgar la vida, los bomberos ponen en juego su salud mental con cada servicio que brindan.
Su principal motor es preservar la vida, sin embargo, no siempre ocurre así, hay ocasiones en las que las llamas ganan la batalla.
"Donde el Tren se llevó un microbús que estaba sobresaturado y pues sí fue el primero y el más impactante en su momento, después de tantos años ves muchas cosas, pero esa ocasión, sino mal recuerdo, fallecieron entre 8 ó 10 personas". José Cortés, Bombero Maquinista y Paramédico.
José recuerda como en su primer año de servicio participó en el rescate de pasajeros en la Avenida Michoacán, trasladando a decenas de personas a hospitales. Lamentablemente la cifra mortal llegó a 24 personas.
"Creo que de los servicios donde más a uno lo marcan mentalmente hablando, creo que son todos aquellos servicios donde hay menores involucrados, desde una lesión hasta donde lamentablemente llegan a perder la vida". Juan Carlos Franco, Capitán de Bomberos Morelia.
Juan Carlos, con más de 20 años de servicio ha visto de todo. Los incendios de gran magnitud son los más agotadores.
"Como las empresas en Ciudad Industrial, más recientemente los mercados Independencia, el Mercado de San Juan, pero creo que también otro servicio donde más ha marcado ha disco el famoso atentado del 2008". Juan Carlos Franco, Capitán de Bomberos Morelia.
Sin importar si el día anterior fue difícil, deben ponerse una vez más el uniforme.
"Pero que después de una jornada difícil lloran en soledad, curan sus heridas y moretones, mientras se lamentan y piensan qué hubiera podido salir mejor". Rodrigo Camacho Sánchez, Jefe de Bomberos Morelia.
Por ello han buscado priorizar la salud mental.
"Terapia, psicólogo con nosotros para nosotros ir sacando todo lo que vas guardando, que aunque es tu trabajo y tienes que hacerlo sí o sí, pero de todas maneras. Somos humanos y hay días en los que no andas con las pilas muy arriba". José Cortés, Bombero Maquinista y Paramédico.
Después de cada servicio se reúnen para evaluar las afectaciones no solo físicas, sino también las mentales. Priorizando su bienestar, para poder velar satisfactoriamente por el bienestar de la ciudadanía.