Debido a que muchas universidades públicas del país atraviesan una condición crítica en materia financiera hay el riesgo de que inicien acciones de inconformidad, principalmente centradas en un paro de actividades.
Representantes de la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios (CONTU) advirtieron que a partir de septiembre 10 universidades públicas del país dejarán de pagar salarios y prestaciones a los trabajadores por la falta de apoyo del gobierno federal.
Las instituciones que enfrentan esa crisis son la Universidad Autónoma de Nayarit, la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, la Universidad Autónoma de Zacatecas, la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, así como las universidades de Morelos, Tabasco, Guerrero, Estado de México, Sinaloa y Chiapas.
Pese a que en 2018 la Federación entregó recursos extraordinarios para 10 universidades públicas por 2 mil 500 millones de pesos para salvar las prestaciones de fin de año, este 2019 parece que no será así.
En caso de que se concrete este amago más de 700 mil alumnos se quedarán sin clases y aproximadamente unos 60 mil trabajadores, entre académicos y administrativos, no recibirán salarios si no hay recurso federal para ello.