Tras la sorpresiva liberación de las vías férreas en la comunidad de Caltzontzin, perteneciente al municipio de Uruapan, después de 22 días ininterrumpidos de bloqueos, se dio a conocer un documento con el membretado del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación y Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación Sección XVIII Poder de Base, donde denuncian que esta acción se dio debido a amenazas que atentaban contra su vida.
En el señalan que los profesores se vieron obligados a retirarse tras recibir amenazas de un grupo de paramilitares, quienes intimidaron a los manifestantes y sus familias.
Por lo anterior, responsabilizan al gobernador Silvano Aureoles Conejo, al equipo de transición del gobernador electo de Michoacán Alfredo Ramírez Bedolla, al gobierno federal y a empresarios de Kansas City, señalándolos como los autores de lo ocurrido, agregando que esta "interpretación de óptica" muestra la próxima política de gobierno que tendrá el estado, siendo anticonstitucional y preocupante del uso de fuerza paramilitares en sustitución de las instituciones del estado, usando la represión, detención y encarcelamiento vía desaparición forzada, así como castigos de tortura física, psicológica y asesinatos masivo-selectivos.
Los actores señalados no se han pronunciado al respecto.
La toma inició el pasado 31 de julio como medida de protesta para exigir el pago de salarios, prestaciones y bonos puntuales al magisterio.