Este 15 de marzo se cumple un año del homicidio del periodista Armando Linares López, director de Monitor Michoacán Zitácuaro, quien fue interceptado por sujetos armados al exterior de su domicilio. La agresión se dio semanas después de que su compañero Roberto Toledo fuera asesinado en la puerta de sus oficinas laborales.
Pese a que el periodista ya había denunciado públicamente ser víctima de amenazas, no había recibido protección, a decir de las autoridades federales, por decisión del mismo comunicador.
Tras su homicidio, diferentes medios de comunicación del municipio sufrieron amenazas, tomando la decisión de cerrar sus redacciones, algunos de los directivos fueron añadidos al sistema de protección de periodistas del gobierno federal, otros simplemente abandonaron sus hogares por temor a sufrir algún atentado en su contra o contra sus familias.
A la fecha, no hay justicia para Armando Linares ni para Roberto Toledo, lo último que informó la Subsecretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana fue que estaban identificados los dos presuntos agresores
Ante esto, colectivo #NiUnoMás Michoacán, emitió un posicionamiento en el que señala la inacción del Estado Mexicano en la prevención del homicidio de Armado, responsabilizando tanto a autoridades federales como estatales. En este evidencian que Zitácuaro se ha vuelto una zona de silencio. Recordando que: "En Michoacán, como en todo el país, ejercer el periodismo es un riesgo permanente y el Estado Mexicano opta por la omisión y el silencio a costa de las vidas de las y los periodistas.".
Exigieron a las fiscalías resultados sobre las investigaciones y al gobernador, Alfredo Ramírez Bedolla, reactivar las mesas de trabajo para la protección de periodistas que quedan en el olvido.
Al igual que el caso de Armando y Roberto, NiUnoMás recuerda a otros diez compañeros periodistas asesinados y cuatro más desaparecidos en Michoacán de 2006 a la fecha.