Los casos de clamidia y sífilis están aumentando en el condado de Pima, pero eso se debe en parte a que las pruebas son cada vez más comunes. El departamento de salud del condado informa que los proveedores médicos no han estado probando proactivomente las ITS en los últimos 10 años. Ese patrón se perpetúa aún más cuando la pandemia golpeó y los recursos se volvieron menos accesibles.
Hartung hizo hincapié en que especialmente las mujeres embarazadas deben hacerse la prueba, ya que la sífilis se puede transmitir a los bebés.