El Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos está contemplando un plan para liberar a migrantes y reducir su capacidad de detención para abordar un déficit presupuestario.
La Casa Blanca y los republicanos del Congreso siguen en una encrucijada sobre la política fronteriza mientras el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos está considerando nuevas medidas para compensar un déficit presupuestario.
Un borrador de plan propone liberar a los migrantes y reducir la capacidad de detención en unas 16 mil camas para compensar un déficit presupuestario de 700 millones de dólares, según un informe del Washington Post.