Tras la visita que hiciera la secretaria de seguridad nacional de Estados Unidos a la frontera entre Arizona y Sonora, en la que anunció la ampliación del programa de construcción del muro fronterizo en 11 kilómetros, grupos ambientalistas indican que de concretarse la construcción del cerco divisorio repercutirá en la flora y fauna endémica de la región.
Así anunció la Secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos Kristi Noem desde algún punto de la frontera, la construcción de 7 millas equivalente a 11 kilómetros de muro divisorio entre Arizona y Sonora, al respecto grupos ambientalistas han manifestado que la edificación de un cerco en las partes que de momento no se tiene, afectará los ecosistemas de diferentes especies endémicas tanto en la flora como en la fauna de la región.
Agrega que se debe acentuar que existen partes en las que sí se da un equilibrio entre la naturaleza y el crecimiento en el desarrollo urbano, para no afectar el hábitat de los animales y la vegetación que se tiene.
Menciona el ambientalista, que aunque ya se ha tratado de continuar con la construcción del muro en al menos tres ocasiones; sin embargo, las leyes internacionales de límites fronterizos hasta el momento impiden que se interrumpa el paso de animales originarios de las zonas desérticas entre Sonora y Arizona, por lo que con la construcción del muro representa una amenaza a su supervivencia y encima se haría una violación a estas leyes de protección ambiental.
Entre Sonora y Arizona se comparten 568 kilómetros de la línea internacional, que Abarca desde la ciudad de San Luis Rio Colorado en Sonora y Yuma en Arizona, hasta el rancho San Bernardino y el área de Apache en Arizona, espacios en los que se cuentan con cruces de ríos en direcciones opuestas que son lugares de suma importancia para la vida silvestre en ambos estados de la unión Americana y de México.
José Ángel Cota, Meganoticias