Nogales, es una de las ciudades fronterizas más dinámicas y pluriculturales de México, donde convergen personas de distintos orígenes, creando una mezcla rica en tradiciones, costumbres y formas de vida. Debido a su ubicación estratégica, a lo largo de los años, esta ciudad ha visto un constante flujo de migración que ha moldeado su carácter multicultural.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), más del 12% de los habitantes de Nogales nacieron en otros estados de la República Mexicana, principalmente en Sinaloa, Chihuahua y Durango. Además, aproximadamente el 8% de la población tiene algún vínculo familiar directo con Estados Unidos, lo que refuerza los lazos transfronterizos y contribuye a la creación de una comunidad binacional.
Por otro lado, la ciudad ha recibido a inmigrantes de Centroamérica, sobre todo en los últimos años. Un informe del Instituto Nacional de Migración (INM) destaca que más del 5% de las personas que transitan por Nogales provienen de países como Guatemala, El Salvador y Honduras. Estos migrantes, aunque en su mayoría están de paso hacia Estados Unidos, también han dejado su huella en la vida social y cultural de la ciudad.
Nogales refleja un amplio legado cultural donde conviven la música norteña, la gastronomía sinaloense, las tradiciones mexicanas y el impacto de la cercanía con Estados Unidos. Esta pluralidad ha sido clave en el desarrollo económico, con negocios que se adaptan a diversas culturas y una comunidad que, a pesar de los desafíos, ha sabido integrar a personas de diferentes orígenes.
La pluriculturalidad de Nogales no solo es una característica distintiva, sino una fortaleza que impulsa su crecimiento y fomenta la convivencia pacífica entre personas de diversos orígenes. En este rincón de la frontera, el intercambio cultural es una constante que transforma a la ciudad en un ejemplo de inclusión y diversidad.