Lavarse la manos adecuadamente es la primera línea de defensa contra la propagación de muchas enfermedades, desde un resfriado o catarro común, hasta enfermedades más graves, como Covid-19, la meningitis la bronquiolitis la gripe la hepatitis a y muchos tipos de diarrea.
Los gérmenes se pueden propagar al tocar unas manos sucias, al cambiar los pañales, a través de agua o comida contaminadas, a través de las gotitas expulsadas en el aire durante la tos o los estornudos.
Mediante superficies contaminadas, a través del contacto con fluidos corporales de una persona enferma.
Una vez infectados, solo suele ser cuestión de tiempo que toda la familia se contagie y acabe contrayendo la misma enfermedad.