Ciudad de México, 25 jun (EFE).- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, cuestionó este martes que la justicia de Estados Unidos haya aplazado por cuarta vez la sentencia de Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México (2006-2012), hallado culpable en aquel país por narcotráfico y corrupción.
"Lo único que me llama la atención es que están posponiendo y posponiendo y posponiendo el veredicto final, ya parecen los jueces de aquí, que archivan expedientes o guardan expedientes", expresó el mandatario en su conferencia matutina.
Sus declaraciones se producen después de que un juez del Tribunal Federal del Distrito Este de Brooklyn admitió hace una semana la solicitud de los abogados de García Luna, artífice de la 'guerra contra el narco' en México, para aplazar hasta el 9 de octubre la fecha en la que recibirá su sentencia en Nueva York.
A García Luna, de 54 años, lo declararon culpable en febrero de 2023 de cinco cargos: participación en la dirección de una empresa criminal (el cártel de Sinaloa), conspiración para la distribución de cocaína, conspiración para distribuirla en Estados Unidos, y conspiración para la importación de esta droga.
El quinto delito era el de prestar falso testimonio a las autoridades estadounidenses cuando solicitó la nacionalidad.
García Luna enfrentaría una condena mínima de 20 años de cárcel o una sentencia máxima de cadena perpetua, pero López Obrador rechazó opinar sobre cuál sería el castigo que debería recibir.
"Sobre la pena, eso corresponde a los jueces", respondió ante cuestionamientos de la prensa.
El caso cobra relevancia en México porque García Luna era el principal funcionario del expresidente Felipe Calderón (2006-2012), el mayor rival político de López Obrador.
"Fue un asunto muy grave porque en ese Gobierno encabezado por Felipe Calderón, que inicia con un fraude electoral, las organizaciones criminales y el narcotráfico se infiltraron en el Gobierno, y en los hechos prevaleció un narcogobierno", comentó ahora el mandatario.
Desde 2012, García Luna vivía en Florida, Estados Unidos, en 2019 lo detuvieron en Dallas (Texas) y a partir de entonces estuvo en prisión hasta el juicio en enero de 2023.
López Obrador respaldó que Estados Unidos trate al exsecretario como testigo protegido para que revele más información y garantice "la no repetición".
"Lo podría ser (testigo protegido) sería bueno que hable. Independientemente de que le rebajen la pena, ayudaría mucho al país para que nunca jamás vuelvan a repetirse esas cosas", mencionó. EFE