La situación del transporte público en Nogales es crítica y requiere una intervención urgente. Es necesario que las autoridades locales y estatales trabajen conjuntamente para renovar las unidades, aumentar la flota y garantizar un servicio eficiente y seguro para todos los usuarios.
En la ciudad de Nogales, el transporte público enfrenta una crisis que afecta diariamente a miles de ciudadanos. Datos locales revelan una situación alarmante: apenas se encuentran en circulación 40 camiones, en el circuito de la Unidad Colosio y 5 de Febrero, solo operan 10 unidades cubriendo ambas rutas. El circuito Lomas de Anza y San Carlos, San Miguel opera con un solo camión para cada sector. La ruta 14 del Periférico dispone únicamente de 8 camiones, mientras que la ruta 15 es atendida por solo 10 unidades de lunes a sábado. Se proyecta que el número de unidades en servicio disminuirá aún más con el inicio del periodo vacacional.
A nivel nacional, los problemas en el servicio de transporte público son comunes y están bien documentados. Según estadísticas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía, el 30% de los usuarios del transporte público en México reportan tiempos de espera excesivos y condiciones de inseguridad en los vehículos.
A pesar de los intentos del municipio de gestionar mejoras ante el Instituto de Movilidad y Transporte del Estado de Sonora, los resultados no han sido los esperados. La comunidad sigue esperando soluciones efectivas que permitan un acceso digno y asequible al transporte público, un derecho esencial para la movilidad y calidad de vida de los ciudadanos.
Específicamente en Nogales, las unidades de transporte son antiguas y no cumplen con las necesidades de la población trabajadora. Los usuarios no pueden costear la cuota diaria de taxis, que oscila entre 70 y 80 pesos por viaje, y mucho menos adquirir un vehículo propio. La falta de información oficial sobre el pésimo servicio por parte de la delegación local del transporte agrava la situación, dejando a los usuarios en una situación de vulnerabilidad y desamparo.