En el estado de Colima la flota de servicio público es de 3 mil 456 vehículos registrados, de los cuales; 2 mil 368 pertenecen al servicio de taxi, 420 al servicio mixto, 352 del servicio suburbano y 316 del urbano, el resto pertenecen a otros rubros.
Asimismo, la secretaría de movilidad cuenta con el registro de 515 chóferes activos de autobús y 4 mil 49 de taxi. Son alrededor de 15 organizaciones del transporte público las que operan en el estado.
En cuanto al servicio de transporte ejecutivo, se estima que son alrededor de 500 unidades las que operan en el estado, pertenecientes a varias empresas.
De acuerdo con líderes transportistas, de las poco más de 600 unidades del transporte urbano y suburbano que operan en la entidad, dejaron de trabajar al menos el 40 por ciento debido a la contingencia por Covid-19, pues el número de usuarios se redujo entre un 85 y 90 por ciento, pues en los municipios de mayor movilidad como Colima, Villa de Álvarez y Tecomán al día se registraban alrededor de 390 pasajeros, mientras que en Manzanillo en días normales se registraban en promedio 430 usuarios, sin embargo, con la emergencia cada camión tenía permitido desplazar solo a diez personas. Actualmente, con el regreso a la nueva normalidad, Zenen Campos Veas, Presidente de la Federación de Transporte Urbano y Suburbano del estado de Colima, informó que han reestablecido en un 75% el servicio e irán retomando actividades de manera escalonada debido a que no les sería redituable trabajar al 100 por ciento si los estudiantes que son su mayor afluencia aún no retoman actividades.
Además, informó que están trabajando bajo varios lineamientos obligatorios como; la sanitización constante de unidades y debidamente aseadas, el uso obligatorio de cubrebocas tanto choferes como usuarios, y solamente tienen permitido trasladar a la misma cantidad de personas en relación a los asientos, es decir, no debe ir gente parada.