Alamos: Encarcelado por atacar a su madre y hermanos

La carpeta de investigación establece como hipótesis de trabajo que Marcelino "N" agredió a golpes su madre, Marcela "N", el día 21 de marzo del año en curso en el interior de una vivienda de la mencionada localidad donde con sus puños comenzó a agredir a la fémina y a amenazarla de muerte.

Tras esto, sus hermanos intervinieron, logrando separar al agresor de la víctima, posteriormente Marcelino "N" ingresó en un cuarto de la casa y tomó una escopeta con la que apuntó a la cara a la víctima amenazándola de muerte.

De nueva cuenta, sus hermanos forcejearon con él, logrando despojarlo del arma, por lo que el sujeto comenzó a proferir amenazas contra ellos y después se retiró de el lugar.

Al día siguiente, Marcelino "N" volvió a la vivienda donde, se ha establecido, agredió a sus hermanos Belén "N" y Ricardo Alberto "N", golpeándolos con el puño a ambos y morder en la pierna al masculino.

El 22 de marzo del año en curso, Leobardo "N", hermano del primer señalado, así como hijo y hermano de las víctimas, arribó al domicilio, golpeó a su madre, la amenazó de muerte e hizo lo mismo con su hermana Belén "N" y su hermano Ricardo "N".

Por lo anterior, la familia interpuso la denuncia correspondiente contra los señalados, se inició la carpeta de investigación por parte de la Fiscalía General de Justicia del Estado de Sonora (FGJES) y se otorgaron las órdenes de aprehensión que fueron cumplimentadas por elementos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal (AMIC).

Tras la captura, fueron puestos a disposición del Juez y se iniciaron las audiencias que demanda la ley, mismas en las que el Ministerio Público presentó las pruebas obtenidas para acreditar la probable responsabilidad de los señalados por los actos previamente descritos, ante lo que el Juez determinó vincular a proceso a los sujetos, siendo Marcelino "N" imputado por tentativa de feminicidio y violencia familiar, mientras que Lamberto "N" quedó vinculado solamente por violencia familiar.

Ambos sujetos fueron recluidos en un Centro de Reinserción Social (CERESO) a la espera de las audiencias subsecuentes y de que su situación jurídica sea resuelta por los tribunales.